Acompañamiento Terapéutico: un camino de sanación, autoconocimiento y plenitud

El acompañamiento terapéutico es el corazón de mi trabajo y la esencia de mi vocación. No se trata únicamente de un recurso en los momentos de dolor o dificultad, sino de un proceso vivo que también acompaña en etapas de bienestar, crecimiento y búsqueda personal. Porque acompañar no es solo sostener cuando todo parece derrumbarse, sino también estar presente cuando alguien quiere profundizar, conocerse mejor y seguir expandiendo su vida desde la plenitud.
En cada sesión encontrarás un espacio seguro, cercano y humano, donde ser escuchada o escuchado de verdad, sin juicios y con respeto. Es un proceso continuo y flexible —semanal o mensual— que se adapta a tus necesidades y que funciona como una guía constante, recordándote que no estás sola ni solo en tu camino.
Mi acompañamiento se inspira en el enfoque humanista y gestáltico, pero no de manera rígida ni teórica, sino como pinceladas que surgen de la experiencia: trabajar desde el presente, dar espacio a lo que sientes en el momento, atender a lo que expresa tu cuerpo y permitir que las emociones encuentren su lugar. Son herramientas vivenciales que ayudan a iluminar lo que antes estaba oculto y a abrir nuevas posibilidades.
De manera orgánica, el proceso también puede incluir meditaciones guiadas, prácticas de respiración consciente, dinámicas energéticas o ejercicios sencillos de conexión. No son pasos obligatorios, sino recursos que aparecen cuando son necesarios, siempre al servicio de tu bienestar.